¿Cómo hacer para no ponerse nervioso en una entrevista de trabajo?

Muchas personas tienen dificultades para controlar su ansiedad o nerviosismo durante una entrevista de trabajo, especialmente aquella para la que el candidato se encuentra deseoso de desempeñarse pero con una cierta presión sobre él.

Por lo tanto, resulta indispensable conocer algunas pautas para evitar sentirse ansioso y así afrontar la entrevista con mayor serenidad.

1. Prepara a conciencia la entrevista

La parte más importante de preparar una entrevista y controlar los nervios inherentes a ella es aprender todo lo posible acerca de la oferta laboral y comprender los requisitos del puesto.

Esto ayuda al candidato a tener confianza en sí mismo durante la entrevista y por lo tanto disminuir el nivel de ansiedad.

También es conveniente pensar con antelación qué tipo de preguntas podrían surgir, planteadas por el entrevistador, y cómo podrás contestarlas con éxito.

Adecuar la presentación a la empresa también ayuda a controlar los nervios en una entrevista de trabajo, pues da una sensación de seguridad cuando el candidato conoce el entorno e intenta encontrar un equilibrio entre ser veraz a la vez que demostrar sus virtudes.

2. Conviértete en un auténtico profesional

Es innegable que una de las causas principales de nervios que sienten la mayoría de candidatos a un puesto de trabajo surge de la competitividad del mercado laboral.

Por eso, una persona consecuente con sus deberes y con la decencia profesional, controlará mejor el nivel de ansiedad que pueda producirse.

La entrevista no es una carrera de velocidad, sino un intercambio de conocimientos y habilidades entre el entrevistador y el candidato, por lo que hay que responder con naturalidad y mostrar la preparación adquirida.

3. Concentración y respiración

Es evidente que el hecho de controlar nuestro nivel de ansiedad durante una entrevista de trabajo es una tarea difícil. Una forma de reducir el estrés relacionado con ello es centrarse en el entrevistador, olvidando la presencia de otras personas que pudieran estar presentes en ella.

La respiración es un factor clave, pues hay que evitar la aprehensión apretando los puños, tensando los músculos o sin controlar la respiración. Por el contrario, es importante inspirar profundamente y respirar normalmente para eliminar la tensión de la entrevista.

La respiración también ayuda a tomarse un descanso mental antes de contestar a la pregunta que se nos hace, así comprenderemos mejor la intención del entrevistador para poder dar una mejor respuesta.

4. Proyecta confianza

Durante una entrevista de trabajo estar seguro de sí, sin segundas intenciones, generará buenas impresiones en el entrevistador. Por lo tanto, la apariencia es crucial, pues dice mucho acerca de cómo te sientes y cómo has preparado el encuentro.

Si un candidato está bien vestido y entabla una conversación positiva, el entrevistador percibirá ese sentimiento de autoconfianza en el candidato.

No caer en la impaciencia y evitar los gestos de nerviosismo también contribuyen a dar la impresión de un soft-skill altamente calificado.

Hablar con firmeza, mantener una postura adecuada y ser humilde durante la entrevista ayudará a conseguir el puesto.

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